Esta metodología educativa fue creada por el
famoso pedagogo Loris Malaguzzi, que afirmaba que los
educandos debían aprender por medio de la observación para poder después desarrollar sus propios proyectos de
creación.
Loris
Malaguzzi nació
el 23 de febrero de 1920 en Correggio, un pequeño pueblo de la provincia de Reggio Emilia. Con tres años se trasladó con su familia
a la ciudad debido al trabajo que desempeñaba su padre, que era ferroviario. Se instalaron en una casa en la Piazza Flume de Reggio Emilia. Es una infancia ligada a esta plaza, que
Malaguzzi recuerda como un lugar importante en su infancia, en su formación, en
su consciencia de felicidad, de lo permitido y lo prohibido. Durante estos años
realiza en la Escuela Primaria su vida escolar como estudiante hasta el curso 1929-1930.
No destacó como gran estudiante. Su interés estuvo ligado a la plaza italiana
de Reggio Emilia y en la que él pasaba grandes ratos.
Piazza Fiume |
La
familia Malaguzzi (formada por el padre, la madre y dos hijos) se traslada al
barrio obrero de Santa Croce. Malaguzzi realiza desde el curso 1930 – 1931 los
estudios en el instituto magistral Principessa de Napoli, durante siete años.
Acabados estos, empieza a trabajar como maestro de escuela primaria, en un
pueblo llamado Reggiolo. Con diecinueve años fue destinado como maestro en
Sologno di Villaminozzo, donde encuentra el sentido del oficio de educador.
La importante experiencia de Sologno
En
Sologno estuvo dos años y recordó en toda su vida las cosas que vivió y
aprendió allí gracias a las imágenes que creó para ello. El diez de diciembre
de 1940 se inscribió en la Facultad de Magisterio de la Universidad de Urbino.
Esta decisión no fue precisamente por vocación, sino que probablemente fue por
la necesidad de hacerse con un título universitario para nuevas funciones
futuras.
El final de carrera como maestro
Después
de la extraordinaria experiencia de Sologno y hasta la primavera de 1944 fue
destinado, primero a la escuela primaria de Via Guasco y, posteriormente a una
caserna de Bolonia. Desde este mismo año hasta el 1947, que fue cuando abandonó
definitivamente la escuela estatal, continuó trabajando como maestro, en esta
ocasión de la escuela media.
Las escuelas de Udi
El 25
de abril de 1945 llega el fin de la guerra y la liberación. En el año de la liberación surge una división clara en Italia
entre el norte y el sur. En el 1943 el AIDI (Associazione degli insegnanti
italiani), formado principalmente por maestras de orientación política de
izquierdas. El problema de la educación infantil entra de pleno en la
sensibilidad política de las mujeres y del movimiento femenino, sobre todo del
UDI (Unione Donne Italiane), de tendencia izquierdista. El UDI se forma en Roma
el 15 de septiembre de 1944.
Malaguzzi y la escuela de Cella
En Reggio
Emilia las instituciones de educación infantil eran, prácticamente,
inexistentes, y las que había eran de titularidad privada de dominio católico.
Las mujeres y sus organizaciones laicas se organizan por construir los primeros
asili nido. Sólo cinco días tras la guerra, el uno de mayo de 1945, con el
dinero del Comitato di Liberazione empieza a construirse esta escuela. Después
de una gran fiesta colectiva, para el final de 1946, la escuela se acaba y el
13 de enero de 1947, el Provveditorato da la autorización de apertura.
Malaguzzi descubre que la escuela, y en concreto la Scuola Materna, es algo más que un lugar dónde enseñar y aprender.
La dificil supervivencia de las escuelas del
Udi
Las
escuelas UDI solicitaron varias veces la municipalización a la administración
local del ayuntamiento de Reggio Emilia, el cual venía continuamente denegado.
Por lo que respeta al tipo de pedagogía desarrollada en aquel momento formaba
parte de los ideales de fondos del movimiento feminista y que siempre buscó
maestros con titulación.
Malaguzzi
necesitaba salir o huir de las ligaduras del propio sistema por construir otra
experiencia que no estuviera legalizada por los viejos esquemas institucionales
de la escuela estatal que permitía poca innovación y originalidad. El 7 de
julio de 1946 Malaguzzi se licencia en pedagogía a la Universidad de Urbino con
una tesis titulada La pedagogía de Fichte.
La afiliación al partido comunista
Acabada
la guerra, Malaguzzi se afilia al Partido Comunista Italiano. Hasta el 1959 no
llegará al Comité Federal. Será muy crítico con todo aquello comunista y la rígida
Associazione Pionieri de
Italia que organizaba reencuentros y campamentos para niños con excesiva
disciplina, una cosa que Malaguzzi no quería.
Malaguzzi, periodista
El diario
le ofrece la oportunidad de estar en la noticia caliente, una cosa que va muy
de acuerdo con la propia personalidad de Malaguzzi. Escribió al diario Il
Progreso d’Italia, diario del partido comunista.
El teatro y Malaguzzi
Es
reconocido
como un impulsor del teatro y de la vida cultural a la ciudad. También
organizó teatro para niños y jóvenes en el llamado Teatro
per Ragazzi, de 1953 a 1956. El 12 de enero de 1959 fundó el primer
Teatro Club
de Italia. El teatro también le da la posibilidad de descubrir la forma
de
transmitir emociones y sentimientos, de comunicarlos.
Algunas experiencias pedagógicas
En el
1952 la Scuola Luciano Fornaciari se ve obligada a cerrar las puertas. Anteriormente, al
1951 y por un periodo de seis meses, Malaguzzi va a Roma a realizar un curso de
especialización en el Centro Nazionale di Recerca (CNR) sobre psicología
escolar. Una experiencia destacable de Malaguzzi en su vida profesional es la
dirección de una escuela para niños con hándicaps, la Lombardo Radice, que dirige de 1958 a 1966.
De las colonie a las Caso di Vacanze
A partir
del año 1960 existe constancia de que Malaguzzi participó en las colonias de
verano organizadas tanto por el Centro Médico-Psico-Pedagógico, el ayuntamiento
de Reggio Emilia y el ayuntamiento de Corregio. En las colonias estivales
Malaguzzi encuentra una manera, más o menos libre, de experimentar algunas de
sus ideas pedagógicas.
Las líneas
pedagógicas de la Casa di Vacanze tenderán a crear un ambiente de seguridad,
incrementar el sentimiento social, satisfacer la necesidad de movimiento y
juego, incrementar la necesidad de hacer y crear, desarrollar la capacidad de
organización y autonomía personal, entre otros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario